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Planeación estratégica, un enfoque hacia el futuro

Instituto Escadia 10 / Mayo / 2024

Resulta interesante abordar un tema que está muy relacionado con el tiempo, justo aquí, en Tiempo Estratégico, prepárate para un viaje donde exploraremos el concepto de planeación estratégica, sus elementos clave y reflexionaremos sobre su profundo impacto en la toma de decisiones empresariales.

Sabemos que cada vez el mundo empresarial es más cambiante y competitivo, así que cada conocimiento, experiencia o habilidad cuenta para hacer la diferencia, la capacidad de anticiparse, adaptarse y liderar son fundamentales para el éxito a largo plazo de cualquier organización. Es en este contexto que la planeación estratégica emerge como una herramienta vital para guiar el rumbo de las empresas hacia un futuro próspero y sostenible. 

Hablemos del concepto de Planeación Estratégica

Recordemos que la primera etapa del proceso administrativo es la planeación, partiendo de ello, podemos comprender la importancia que tiene en la estructura y desarrollo de una organización. Así, la planeación estratégica es una mirada hacia el futuro, una previsión, que se basa en obtención de información, definición de objetivos y un profundo conocimiento del contexto en el que se desarrolla el negocio. 

Existen diversos conceptos de planeación estratégica y la mayoría coincide en que es un proceso sistemático y continuo de alta gerencia, por medio del cual una organización define sus objetivos y estrategias como medios de acción, para ello se vale del análisis de factores internos y externos, enmarcados en la misión, visión y valores, de manera que permitan alcanzar dichos objetivos a largo plazo. En este proceso también es necesario considerar el uso eficiente de los recursos disponibles. 

Es esencial estar conscientes que, la planeación estratégica va más allá de simplemente reaccionar a los cambios del entorno; implica anticipar y dar forma activamente al futuro de la empresa, es un tipo de brújula para la toma de decisiones, ayudando a las organizaciones a establecer una dirección clara y a alinear sus recursos y acciones para lograr sus metas. 

La planeación estratégica sin duda es una herramienta que le permite a la empresa ser creativa en vez de reactiva en la formulación de su futuro, ayudando a la organización a operar de manera efectiva, sobre todo dentro de un ambiente complejo y dinámico afectado permanentemente por restricciones y amenazas. 

Elementos clave de la Planeación Estratégica

Comprender el concepto de planeación estratégica es el primer paso para desarrollarla, sin embargo, se requiere más información para ponerlo en práctica, profundicemos en los elementos que conforman este proceso y qué herramientas nos ayudan a definirlos. 

  • Análisis del entorno

Se refiere a una evaluación exhaustiva del entorno externo e interno de la organización, es aquí donde es necesario identificar las oportunidades, amenazas, fortalezas y debilidades. Los factores externos pueden incluir tendencias del mercado, cambios en la industria, regulaciones gubernamentales, condiciones económicas, tecnología emergente, y más. El objetivo del análisis del entorno es identificar oportunidades que la organización puede aprovechar y amenazas que debe mitigar. Por otro lado, en factores internos podemos encontrar aspectos como ser una marca reconocida, contar con tecnología avanzada, con recurso humano talentoso o es su caso, una infraestructura obsoleta, débil presencia en línea, red de distribución deficiente, entre otros. 

La herramienta básica para el análisis de entorno es el FODA (fortalezas, oportunidades, debilidades y amenazas), del cual hemos hablado más a detalle en nuestro blog “Negocios en Breve”.

  • Establecimiento de objetivos

Ya bien nos contaban en la historia de Alicia en el país de las Maravillas, no solo se trata de preguntar por dónde me voy, sino partir de la pregunta hacia dónde quiero ir, es el ejemplo clásico para reflexionar sobre la importancia de definir objetivos, una empresa que no tiene claro qué quiere lograr no sabrá por dónde empezar, qué estrategias diseñar e ir dando tumbos sin rumbo, alargando su camino hacia el éxito o incluso, perdiéndolo por completo. Así, definir las metas a largo plazo es crucial para la planeación estratégica. 

Para establecer los objetivos de tu empresa puedes recurrir a la metodología SMART, que se refiere a que dichos objetivos sean específicos, medibles, alcanzables, relevantes y con un plazo de tiempo definido, este acrónimo es por sus iniciales en inglés. Esta herramienta es ampliamente utilizada para definir objetivos efectivos y alcanzables en una variedad de contextos, incluidos los negocios. Aquí te dejamos una explicación detallada de cada componente de los objetivos SMART:

  • Específico (Specific): Los objetivos deben ser claros y específicos, evitando la ambigüedad y la generalización, puedes ayudarte respondiendo a estas preguntas:

¿Qué quiero lograr?

¿Por qué es importante este objetivo?

¿Qué recursos o pasos son necesarios para alcanzarlo?

¿Quién estará involucrado en la consecución de este objetivo?

¿Cuándo y dónde se realizará?

  • Medible (Measurable): Los objetivos deben ser cuantificables y verificables, lo que permite evaluar claramente si se han alcanzado. Para hacer que un objetivo sea medible, considera las siguientes cuestiones: 

¿Cómo sabré cuando haya alcanzado este objetivo?

¿Qué indicadores o métricas utilizaré para medir el progreso hacia el objetivo?

¿Cuánto, cuántas veces, o qué tan frecuentemente debo hacer algo para lograrlo?

  • Alcanzable (Achievable): Los objetivos deben ser realistas y alcanzables dentro de un marco de tiempo y recursos dados. Al evaluar la factibilidad de un objetivo, pregúntate:

¿Es este objetivo realista teniendo en cuenta las habilidades, recursos y limitaciones actuales?

¿Existen obstáculos o desafíos que podrían impedir alcanzar este objetivo?

¿Qué pasos se pueden tomar para superar estos obstáculos y aumentar las posibilidades de éxito?

  • Relevante (Relevant): Los objetivos deben estar alineados con los valores, objetivos y prioridades más amplios de la organización o individuo, te dejamos estas preguntas para determinar la relevancia de dicho objetivo: 

¿Cómo contribuye este objetivo a las metas a largo plazo?

¿Es coherente con los objetivos estratégicos de la organización?

¿Por qué es importante lograr este objetivo en este momento?

  • Temporal (Time-bound): Los objetivos deben tener un marco temporal claro y definido para su logro, es decir, establecer un plazo límite proporciona un sentido de urgencia y ayuda a mantener el enfoque, ayúdate con estas preguntas: 

¿Cuándo se quiere lograr este objetivo?

¿Qué pasos específicos se deben tomar y en qué momento para avanzar hacia este objetivo?

¿Cuáles son las fechas límite para monitorear el progreso?

Si duda todo se clarifica con un ejemplo, he aquí un objetivo SMART:

Objetivo: «Incrementar las ventas en un 10% durante el próximo trimestre mediante una mejora en las estrategias de marketing digital»

    • Específico: Aumentar las ventas mediante una estrategia específica de marketing digital.
    • Medible: Se medirá el aumento del 10% en las ventas utilizando datos de ventas y análisis de rendimiento.
    • Alcanzable: La estrategia de marketing digital es viable y los recursos necesarios están disponibles.
    • Relevante: Alineado con el objetivo general de aumentar los ingresos y mejorar la presencia en línea.
    • Temporal: Se establece un plazo de tres meses para alcanzar el objetivo, con hitos intermedios para evaluar el progreso.

  • Desarrollo de estrategias

Es aquí donde la creatividad, el conocimiento, la experiencia y las competencias del equipo de alta gerencia se unen para crear los planes detallados y así alcanzar los objetivos establecidos. Es indispensable que se identifiquen las acciones y recursos necesarios, así como las tácticas específicas para ejecutar dichas estrategias. 

Existen tres tipos de estrategias y es importante que las identifiques: 

  • Estrategia corporativa: Es aquella que considera la misión, visión y valores de una empresa, tiene el objetivo de plantear metas a largo plazo, siempre considerando su público objetivo, por lo tanto, se enfoque a la manera en la que la empresa desea ser conocida dentro de su sector. Incide, entonces, directamente en la proyección de la identidad corporativa. La cuestión principal es alinear las estrategias con los valores y reputación que se quiere construir, así como el impacto que pueden tener. 
  • Estrategia de negocio o competitiva: Este tipo de estrategia se relaciona con las actividades comerciales de la organización, por ello, se enfoca en las estrategias de marketing, campañas, análisis del público objetivo y, por supuesto, las tendencias del mercado. También abarca la investigación de la competencia y la participación de mercado. 
  • Estrategia cooperativa o funcional: Se enfoca en el esquema de la organización, es decir, aquellas estrategias que establecen qué roles, departamentos, vacantes son requeridos en la empresa, así como los horarios laborales, sueldos y otros elementos logísticos. 

Una vez que se han diseñado las estrategias para la organización, resulta conveniente mantenerlas vigentes, para ello, te recomendamos que las revises de manera periódica para adaptarte a los cambios que vayan surgiendo; ajusta según la retroalimentación directa de tu público meta; procura estar informado de las tácticas de la competencia; fomenta un ambiente de innovación donde tus colaboradores puedan aportar sus ideas y nutrir tu estrategia; por supuesto, lo más importante, establece KPI’s para evaluar el proceso y tomar decisiones en consecuencia. 

  • Implementación

Llega el momento de la aplicación, ahora se ejecutan las estrategias diseñadas asignando recursos y estableciendo responsabilidades, para ello, es crucial tener una comunicación efectiva, ya que trasmitir el plan de acción a todos los miembros de la organización requiere de asertividad y de elegir los medios adecuados. En este proceso, es esencial no dar por sentado que el solo hecho de informar al responsable es sinónimo de compromiso, te sugerimos acordar compromiso por escrito y de forma clara, asegurando que todos saben exactamente cuáles son sus responsabilidades y cuál es el impacto de su labor en cada estrategia. 

  • Evaluación y control

Ya nos lo decía Peter Drucker, lo que no se se mide no se puede controlar; lo que no se puede controlar no se puede gestionar; lo que no se puede gestionar no se puede mejorar. Esta frase engloba la importancia de dar un seguimiento a las estrategias mediante una evaluación que nos permita discernir si están funcionando o no de acuerdo a nuestro plan. Conocer esto a tiempo nos ayuda a realizar los ajustes que sean necesarios, pero sobre todo, aprender de los éxitos y los fracasos para poder enfocarnos en la mejora continua. 

Impacto de la Planeación Estratégica en la toma de decisiones

La toma de decisiones es algo que nos acompaña toda la vida, desde que nos hacemos conscientes nuestra trayectoria está llena de pequeñas y grandes decisiones, desde levantarse a cierta hora, elegir qué carrera estudiar, hasta apostar por un emprendimiento son ejemplos de cómo de manera diaria elegimos ciertos caminos. Lo mismo sucede en la empresa, cada decisión que se toma afecta directamente el desarrollo de una organización, por esta razón, es importante tener una guía y sustento para decidir de la mejor manera posible. 

Así, la planeación estratégica es una herramienta de gestión que permite establecer procesos mediante los cuales las organizaciones toman decisiones, delimitan plazos y asignan los recursos, todo para lograr los objetivos planteados. Sin embargo, no solo es cuestión de tomar decisiones a mediano y largo plazo, si bien la planeación estratégica nos ayuda a ser previsores y delinear por anticipado qué es lo que se va a hacer, existen situaciones emergentes que ameritan una toma de decisiones de manera urgente, ya que, no todos los cambios y demandas del entorno se pueden prever. Solo ten presente que, ante cualquier situación, tu planeación estratégica es tu eje, se puede modificar, ser flexible, pero la base en la que está sustentada tiene una razón de ser y está alineada con la identidad de tu organización. 

Entonces, la planeación estratégica tiene un impacto profundo en la toma de decisiones empresariales, porque ayuda a las organizaciones a enfocarse en los objetivos a largo plazo y a priorizar las acciones que conducirán al logro de esos objetivos; les permite anticiparse y mitigar los riesgos potenciales al considerar tanto las amenazas externas como las debilidades internas; facilita la alineación de todas las áreas de la organización hacia una visión común y unos objetivos compartidos; proporciona un marco para la adaptación y la flexibilidad, permitiendo a las empresas ajustar sus estrategias según evolucione el entorno empresarial y ofrece una base sólida y datos concretos para informar las decisiones empresariales, lo que aumenta la probabilidad de éxito y reduce la incertidumbre.

Hasta este punto queda claro que la planeación estratégica es una herramienta esencial para guiar el rumbo de las organizaciones hacia un futuro exitoso, pues, proporciona una dirección clara, establece objetivos específicos y desarrolla estrategias efectivas, además, permite a las empresas adaptarse y prosperar en un entorno empresarial cada vez más competitivo y cambiante. Su impacto en la toma de decisiones es profundo y significativo, asegurando que las decisiones empresariales estén informadas, alineadas y orientadas hacia el logro de los objetivos a largo plazo, sin dejar de considerar las situaciones emergentes que requieren decisiones rápidas. Sin lugar a dudas la planeación estratégica no solo es una herramienta de gestión, sino también un impulsor fundamental del éxito empresarial en el mundo actual.

¿Qué pasa cuando una organización no le da la importancia a la planeación estratégica?, ¿qué diferencias puede haber entre una empresa que tenga bien establecido un plan a largo plazo y otra que no?, ¿acaso omitir una planeación estratégica es sinónimo de fracaso?, son varias las interrogantes que podemos hacernos relacionadas con la planeación estratégica, sin embargo, la última palabra la tienes tú, en Tiempo Estratégico nos encanta leer tus comentarios y comenzar la conversación sobre lo que has aprendido al respecto y como tu experiencia puede ayudar a otros. 

¡Seguimos reflexionando sobre el éxito empresarial, hasta la próxima!